Tradicionalmente se ha considerado a los departamentos de personal como un staff mixto que, además de asesorar en asuntos laborales, gestiona cuestiones relativas a la plantilla. Estos departamentos no ocupan un nivel demasiado elevado en el organigrama empresarial, y su capacidad de decisión es muy limitada, pues prevalecen las funciones asesoras, propias de un staff.
La adopción del modelo de recursos humanos implica integrar este departamento dentro del nivel estratégico de la empresa. En consecuencia, se convierte en un departamento de línea que opera al máximo nivel e interviene en la planificación a medio y largo plazo. En este enfoque se pueden mantener algunas funciones como staff. Así, por ejemplo, se puede crear una sección de selección encargada exclusivamente de asesorar sobre qué personas deben integrarse en la plantilla (función staff); las decisiones de admisión corresponderían a la dirección de recursos humanos (departamento línea, del más alto nivel).
En la Figura 1.12 se puede ver un organigrama parcial donde aparece el departamento de recursos humanos dentro de la dirección estratégica de la entidad, junto con una sección de naturaleza staff (departamento de selección y formación). Evidentemente, las posibilidades de insertar este departamento dentro de la organización de la empresa son muy amplias.
El modelo está conformado por los siguientes elementos:
I. Fundamentos y desafíos: la administración de personal enfrenta desafíos múltiples en su labor. El principal desafío consiste en ayudar a las organizaciones a mejorar su efectividad y su eficiencia. Otros desafíos se organizan en el entorno en que operan las organizaciones, la economía, las alternativas de mercado y las disposiciones oficiales, entre otras. Los desafíos pueden surgir también del interior de las organizaciones.
II. Planeamiento y selección: Constituye el núcleo de la administración de personal y requiere de una base de datos adecuada sobre cada puesto y las necesidades futuras de R.H. que permitan el reclutamiento y selección de los empleados necesarios.
III. Desarrollo y evaluación: una vez contratados los nuevos empleados reciben orientación sobre las políticas y los procedimientos de la empresa. Se les asignan los puestos que les corresponden, reciben la capacitación necesaria para ser productivos. Además, se llevan a cabo evaluaciones formales del desempeño periódicamente.
IV. Compensaciones: Es un elemento vital para mantener y motivar a la fuerza de trabajo. Los empleados deben recibir un salario justo y ser protegidos de riesgos de todo tipo, incluyendo en ese campo la prevención de accidentes y enfermedades profesionales.
V. Servicios al personal: Deben brindarse a los empleados prestaciones y condiciones laborales adecuadas, así como asesoría para enfrentar problemas y tensiones que se originen en el trabajo. Los sistemas de comunicación también contribuyen a la motivación de los empleados.
VI. Relaciones con el Sindicato: existe una estrecha relación de todas las actividades del departamento de personal con las actividades sindicales, por lo que es necesario tenerlo presente a la hora de gestionar los RH.
VII. Perspectiva general de la administración de personal: los departamentos de personal necesitan recibir retroalimentación sobre su desempeño. Por esta razón, se someten a verificaciones y comprobaciones, y realizan investigaciones para identificar métodos más efectivos de servir a su organización.
Este modelo posee carácter funcional pues muestra la interrelación de todos los elementos del sistema de RH vinculados con los objetivos que se pueden lograr, evidenciando que la materialización sólo es posible con un adecuado sistema de GRH. Se considera positivo el papel inicial que le otorga a los fundamentos y desafíos, donde incluye al entorno como base para establecer el sistema y además muestra a la auditoría como elemento de retroalimentación y de continuidad en la operación de la GRH. Por último se considera que separar las compensaciones y los servicios al personal pueden restarle integralidad al modelo pues ambos elementos forman parte del enfoque sistémico del sistema de recompensas.